Las emprendoras Laura Fares y Natalia Pizarro se lanzaron a la aventura de crear un pisco argentino, para salir a jugar en un mercado dominado por peruanos y chilenos. Desde Mendonza, crearon Calavera, elaborado a base de uvas blancas finas, que propone un viaje de sensaciones intensamente suave y refrescante.
Cofermentación de Torrontés Riojano y Moscatel de Alejandría con sus pieles a bajas temperaturas para conservar aromas propios de estas dos variedades. Cosechadas a mano en la zona norte de Mendoza.
La primera destilación se realiza en alambique estilo Charentais donde se alcanza un cuerpo de destilación a 40%vol y se encuentran todos los aromas y sabores de la fermentación. En la segunda destilación se separan cabezas y colas en un alambique de columna, donde se obtiene un destilado puro y se consigue balancear la calidad aromática y frescura en boca.
Color: Incoloro cristalino.
Aroma: Fresco con notas a ruda, cítricos y menta, que luego dan lugar a aromas típicos de la uva moscatel de Alejandría, como miel y jazmín.
Sabor: Entrada sutil y suave, se abre a los pocos segundos dando lugar al durazno blanco balanceado con el dulzor de un almíbar.